¿Qué es el suelo radiante?

Los sistemas de suelo radiante para calefacción de edificios se empezaron a utilizar en el siglo I a. C., el hipocausto, inventado por el ingeniero romano Cayo Sergio Orata, y tras más de 2000 años de uso, hoy en día es el sistema más eficiente de calefacción y también el más confortable.
La evolución técnica ha conducido a los sistemas de climatización radiante, consiguiendo este sistema emisor, producir una sana climatización durante todo el año, tanto en frío como en calor.

¿Cómo funciona?

  • La emisión de calor que realiza el suelo radiante se realiza de dos formas; radiación (70-80%) y convección (30-20%)
  • La convección es la transmisión del calor a través del aire, un buen ejemplo son los radiadores o equipos de aire acondicionado
  • La radiación no necesita el aire, ya que viaja en forma de ondas electromagnéticas que propagan la energía incluso en el vacío. Para entenderlo, tomaremos como ejemplo la radiación solar, que se propaga por el espacio, calentando las masas sin llegar a calentar significativamente el aire. De hecho, la convección del aire en la tierra se produce por el contacto de este con el terreno caliente, lo que produce corrientes de aire ascendentes
  • El suelo radiante es pues, un emisor de calor que usa mayormente la radiación infrarroja para propagar el calor, y tiene un pequeño componente de convección que en la práctica es imperceptible
  • Podemos afirmar que el suelo radiante es el sistema de calefacción que más se acerca a la calefacción ideal

Es un sistema de climatización compuesto por diferentes elementos que garantizan la máxima eficiencia y calidad del sistema. Este está compuesto por un panel aislante térmico que permite minimizar las pérdidas caloríficas descendentes. Al mismo se fija la tubería por donde se hace circular un fluido caloportador (normalmente agua), que cede su energía calorífica a una capa de mortero que se coloca por encima y alrededor del tubo. Dicha capa almacena la energía y esta es cedida al pavimento de la vivienda, que a su vez la entrega al ambiente en forma de radiación.

Ventajas

Confort ideal.

Proporciona bienestar por radiación procedente del suelo, de manera que no existe el problema de la convección del aire producida por radiadores, con las molestias derivadas. No existe estratificación y la temperatura es homogénea en todas las áreas del recinto, ya que se aprovecha toda la superficie útil disponible del mismo.

Ahorro energético.

El disponer de una gran superficie para la radiación permite trabajar con temperaturas de aguas muy reducidas.

Salud.

Reduce los problemas derivados de la convección a las personas con alergias al polvo.

Comparativas

Curva roja: Curva de calefacción ideal

Curva verde: Curva de calefacción por suelo radiante

Curva azul: Curva de calefacción radiadores

Tipos de suelo

TERMOFORMADO CON TETONES (40º-45º)

SISTEMA LISO (35º-40º)

SISTEMA CON DIFUSOR DE ALUMINIO (30º-35º)